EN EL FORO DE DAVOS
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se encuentra en Davos para defender y representar los intereses de los estadounidenses, ya que "siempre" pondrá a "EEUU primero", ha afirmado, pero recalcó que ello no quiere decir "EEUU solo" porque quiere que todos prosperen y crear un mundo mejor.
"Estoy aquí para representar los intereses de los estadounidenses y para reafirmar la amistad y la cooperación de EEUU a la hora de crear un mundo mejor", dijo Trump en su esperado discurso ante el Foro Económico Mundial de Davos. "Como todas las naciones en este Foro, EEUU quiere un futuro mejor para que todo el mundo pueda prosperar y cada niño pueda crecer sin violencia, sin pobreza y sin miedo", recalcó.
En el plano económico, después de años de estancamiento, "EEUU una vez más experimenta un crecimiento económico fuerte y los mercados de valores baten un récord tras otro y han añadido más de siete billones de dólares a la riqueza desde mi elección", afirmó.
La confianza de los consumidores, las empresas y las fábricas "están en los niveles más altos en décadas" y desde que asumió hace un año las riendas de la primera potencia mundial "hemos creado 2,4 millones de empleos", aseguró. El optimismo de las pequeñas empresas se encuentra en niveles récord y las solicitudes de desempleo en los más bajos "en casi un siglo", aseveró Trump.
"El mundo está siendo testigo del resurgimiento de un EEUU fuerte y próspero y estoy aquí para dar un simple mensaje: Nunca ha habido un momento mejor para contratar, construir, invertir y crecer en Estados Unidos", dijo. "EEUU está abierto para el negocio y volvemos a ser competitivos", aseguró el mandatario, quien puso de ejemplo su rebaja fiscal, "la mayor en la historia de EEUU", que alivia a la clase media, a las pequeñas empresas y a las compañías grandes.
Trump también destacó sus esfuerzos para reducir las regulaciones y aseguró a los empresarios presentes en su discurso en Davos que por todo ello "ahora es el momento perfecto para que ustedes lleven sus empresas, sus empleos y sus inversiones a EEUU". Subrayó que, como mandatario, "siempre pondré a EEUU primero, al igual que lo deberían hacer los otros líderes con sus países", pero dejó claro que esto "no quiere decir 'EEUU solo". "Cuando EEUU crece, también lo hace el mundo", insistió.
No obstante, subrayó que no permitirá que ello se produzca a costa de su país. "Trabajamos en reformar el sistema comercial internacional" para repartir la prosperidad compartida y "premiar a aquellos que juegan acorde a las reglas", aseguró. "No podemos tener un comercio libre y abierto si algunos países explotan el sistema a costa de los demás. Apoyamos el libre comercio, pero éste tiene que ser justo y recíproco porque al final un comercio injusto nos socava a todos", insistió.
Trump también advirtió que "ya no cerrará los ojos ante prácticas económicas injustas como el robo masivo de la propiedad intelectual, subsidios industriales y planificaciones estatales persuasivas". "Estos y otros comportamientos depredadores distorsionan el mercado global y perjudican a las empresas y a los trabajadores, no solo en EEUU sino en todo el mundo", indicó.
El presidente abogó por hacer cumplir las reglas comerciales y por "restaurar la integridad del sistema comercial, y dijo estar dispuesto "a negociar acuerdos comerciales bilaterales que sean mutuamente beneficiosos", lo que incluirá a los países de la Alianza Transpacífica (TPP) que EEUU abandonó, prometió.