LAMENTA SU "RETRASO EN RESPONDER"
El exasesor de la Casa Blanca Steve Bannon pidió perdón profusamente al presidente, Donald Trump, por no haber respondido antes a la información "errónea" contenida en el incendiario libro 'Fire and Fury' ('Fuego y Furia'), que ha abierto una brecha entre ambos. "Lamento que mi retraso en responder a la información errónea sobre Don Jr (el primogénito de Trump) haya desviado la atención de los históricos logros del presidente en su primer año de Presidencia", afirmó Bannon en un comunicado, en el que subraya que su apoyo al mandatario y su agenda es "inquebrantable".
Trump rompió esta semana con su antiguo estratega jefe, del que dijo que "ha perdido la cabeza" y es un "chapucero", irritado por la aparición de Bannon citado en el polémico libro de Michael Wolff, criticando a su hijo Donald por una reunión con un grupo de rusos. "Mis comentarios estaban dirigidos a Paul Manafort, un veterano profesional de campañas con experiencia y conocimientos sobre cómo operan los rusos. Él debería haber sabido que son falsos, maliciosos y no nuestros amigos. Reitero: esos comentarios no estaban dirigidos a Don Jr.", indicó Bannon.
Además, el exasesor se prodigó en elogios a Donald Jr., del que dijo que es un "patriota", un "buen hombre" y que "ha sido incesante en su defensa de su padre y de la agenda que ha permitido darle la vuelta al país". "Todo lo que tengo que decir sobre la ridícula naturaleza de la investigación sobre la colusión rusa lo dije en mi entrevista con 60 Minutes. No hubo colusión y la investigación es una caza de brujas", agregó.
Bannon reitera su apoyo al presidente, como ha mostrado, argumenta, "diariamente" en sus emisiones de radio, en Breitbart News (la publicación ultraconservadora que preside) y en discursos. "Trump era el único candidato que podría haber derrotado al aparato Clinton. Yo soy la única persona hasta la fecha en hacer un esfuerzo global por predicar el mensaje de Trump y el Trumpismo; y sigo listo para pararme en la brecha por los esfuerzos de este presidente para hacer a Estados Unidos grande de nuevo", sostuvo.
Por el momento el presidente, de vuelta en Washington tras un retiro de trabajo en Camp David (Maryland), no ha respondido al comunicado de Bannon, pero esta semana ha sido durísimo con él a diario. El 18 de agosto pasado, la Casa Blanca anunció la marcha de Bannon como un acuerdo entre él y Trump, pero diversas fuentes indicaron a los medios que fue un despido, algo que el presidente confirmó este viernes.