TUITEA MUCHOS DE SUS TITULARES
El presidente Donald Trump se levanta, enciende la televisión, conecta la Fox, ve el programa matutino y escucha esta opinión sobre Chelsea Manning, el militar que filtró documentos a Wikileaks. "Traidor, desagradecido", decía la cadena. Catorce minutos después en twitter, Trump escribe exactamente lo mismo, "Nunca debió ser liberado", añade.
La televisión conservadora es su referencia. Trump es entrevistado por un periodista de la ABC. Hasta en tres ocasiones le dice que conecte la Fox porque ahí está la verdad.
Su influencia en la Casa Blanca es evidente. El martes el presidente Trump, antes de cenar, veía también en su cadena favorita las estadísticas sobre la violencia en Chicago. De nuevo calca el mensaje en un tuit y advierte que mandará a los federales.
Muchos se pregunta si gobiernan el presidente o la Fox. Seguido en su cuenta por 20 millones de personas Trump, sin embargo, sólo sigue a unos cuantos y a un único medio de comunicación, por supuesto, la cadena de noticias Fox.
Antes de asumir la presidencia, Trump dudaba de si seguiría tuiteando. "Creo que voy a utilizarlo menos pero no se", asegura. Es evidente que no lo ha hecho.