Terremoto en Turquía
Entre lamentos Idris identifica a sus familiares fallecidos en el terremoto de Turquía y Siria.
El terremoto que ha arrasado buena parte de Turquía y Siria deja bajo los escombros trágicas historias. El número de muertos ya se ha elevado a 11.000 y tras esa cifra hay nombres y apellidos como el de Idris que entre lamentos identifica en una morgue los cadáveres de sus parientes.
Con dolor calcula a cuantas personas ha perdido en este seísmo, nada menos que 25 seres queridos han fallecido en esta catástrofe natural. La de Idris es una familia numerosa de desplazados por la guerra, como más de la mitad de los habitantes del noroeste de Siria.
Las dificultades de que las ayudas lleguen a Siria
En Alepo, los salesianos acogen a gente sin hogar y afrontan cada nueva mañana con miedo al futuro ya que no saben si van a poder regresar a sus casas. También hay incertidumbre alrededor de las ayudas. Siria es un país en guerra, con unas infraestructuras muy pobres y el único paso fronterizo con Turquía ha quedado muy dañado.
Además, el regimen de al-Asad está diplomáticamente aislado del mundo occidental y muchos países le han impuesto sanciones. Ya antes de los seísmos, Siria sufría su peor crisis humanitaria desde el estallido de las revueltas contra Damasco en 2011 y el posterior inicio de la guerra, con el 90 % de la población sumida en la pobreza, desabastecimientos de productos básicos y millones de personas desplazadas.
Por ello, el director regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el Mediterráneo Oriental, Ahmed al Mandhari, denunció hoy que no hay que esperar a "eventos trágicos" como los terremotos para recordar la situación en Siria, que ya no venía recibiendo ni la mitad de la financiación requerida.