Francia
El gesto del presidente francés, Emmanuel Macron, ha creado un revuelo en las redes sociales y medios de comunicación, quienes lo acusan de vivir en una realidad paralela.
En Francia no se vivían unas protestas tan masivas y violentas desde las manifestaciones protagonizadas por los chalecos amarillo en 2018. La agitación de los ciudadanos franceses cada vez es mayor y más a raíz de la última entrevista dada por Emmanuel Macron el pasado miércoles, 22 de marzo, quien acudía a la televisión para defender la reforma pensiones.
Toda palabra y movimiento del presidente francés están en el punto de mira, por lo que un simple gesto, como quitarse 'disimuladamente' el reloj de la muñeca –valorado en 80.000 euros– le ha creado una nueva polémica.
Macron aparecía en las pantallas de todas las televisiones francesas con un reloj de lujo en su muñeca. A los diez minutos de entrevista y tras esconder las manos bajo la mesa y volverlas a poner sobre ella, el reloj ya no estaba. Una imagen que las redes sociales y los medios de comunicación no han pasado por alto.
Desde el Elíseo han aclarado que Macron se retiró el reloj para evitar ruidos sobre la mesa, algo que los ciudadanos 'no compran' y, además, han afirmado que el precio real de ese reloj es de 2.000 euros y no las cifras que otros expertos establecen.
A raíz de este gesto, muchos lo acusan de estar fuera de la realidad que se está viviendo en todo el país. Asimismo, el equipo del presidente asegura que se trata de un gesto inocente, pero la oposición ha cargado duramente contra Macron.
"Al hablar de los 'smicards' que 'nunca habían ganado tanto poder adquisitivo', se quita discretamente su bonito reloj de lujo, debajo de la mesa. Este hombre es una broma", decía Clémence Guetté, del partido La France Insoumise.