Invasión rusa de Ucrania de 2022
Vitaly Suárez nos muestra las largas colas a temperaturas extremas bajo cero que los habitantes de Jersón tienen que hacer para conseguir algo de comida.
Los termómetros marcan los 8 grados bajo cero en la ciudad ucraniana de Jersón cuando se cumple el decimosexto día de la guerra entre Ucrania y Rusia. Vitaly Suárez ha vuelto a salir a las calles para tratar de conseguir provisiones que poder repartir a las personas más vulnerables.
Está nevando en Jersón cuando Vitaly se dispone a salir a la calle para ir a un almacén donde tiene guardado 30 kilos de pollo para repartir entre la gente mayor, gente que no puede salir de su casa y que tiene problemas de salud como de corazón o tensión.
"Cada día estamos recibiendo más llamadas" explica Vitaly de gente que necesita ayuda por eso agradece las aportaciones recibidas pero avisa de que tras los gastos "que hemos tenido estamos ya flojos económicamente y ahora estamos esperando a ver si podéis apoyarnos para que no paremos de ayudar".
Suárez narra que los soldados rusos están bloqueando las carreteras, "es imposible que entre algo nuevo de comida o medicamentos". Esta situación obliga a Vitaly a tener que recorrer más kilómetros en busca de víveres. "Cada día nos arriesgamos a salir a otros pueblos a ver si buscando en almacenes, en tiendas cerradas cuyos propietarios tienen miedo de abrir". Suárez nos cuenta como buscan los contactos de las gentes de las tiendas y así compran lo que hace falta "pagando a veces por encima de lo que cuesta".
Colas larguísimas a las puertas de una carnicería, pese a la nieve que cae. Cuando la gente consigue acceder al interior del local lo que se encuentran es estantes medio vacíos.
Vitaly ha podido comprar carne, después fue a buscar pan y luego irá al almacén a buscar un poco de macarrones para repartir entre 10 familias.