Tiroteo en EEUU
El padre del presunto tirador también está acusado de dos cargos de asesinato en segundo grado y ocho cargos de crueldad infantil.
Llegan novedades del tiroteo de Georgia en el que murieron cuatro personas en un instituto. El padre del autor de los disparos de 14 años ha sido detenido y acusado de homicidio involuntario. Las autoridades acusan al progenitor de regalarle el fusil con el que cometió los asesinatos. Según los investigadores, "permitió deliberadamente" que su hijo tomara el arma.
El joven de 14 años que fue detenido en el lugar de los hechos afronta cuatro cargos de asesinato por los que será juzgado como un adulto. Así lo ha confirmado el director de la Oficina de Investigaciones de Georgia (OIG), Chris Hosey, en una rueda de prensa. Además, el padre del presunto tirador está acusado de dos cargos de asesinato en segundo grado y ocho cargos de crueldad infantil.
Han habido nuevas detenciones relacionadas con "incidentes de otros estudiantes que han hecho amenazas hoy en varias escuelas" en el estado de Georgia, dijo el director de la OIG. El chico de 14 años disparó con un fusil semiautomático AR-15. La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Georgia ya le investigó hace un año por amenazar con un tiroteo escolar a través de internet. En aquel momento ya fue interrogado junto a su padre.
Respecto a aquellas amenazas, el detenido negó ser el responsable. Su padre comentó que tenía armas en casa pero que estaban a buen recaudo y que el hijo no las tenía a su alcance. Los cuatro muertos en el tiroteo son dos estudiantes de 14 años y dos profesores de matemáticas de 53 y 39 años. Asimismo, otras nueve personas resultaron heridas en el tiroteo del centro Apalachee. Dos ya han sido dadas de alta pero siete siguen hospitalizadas aunque no se teme por su vida.
La vicepresidenta estadounidense y candidata del Partido Demócrata a la presidencia en las elecciones de noviembre, Kamala Harris, calificó este tiroteo de "tragedia sin sentido" y pidió "el fin de esta epidemia de violencia con armas de fuego". Fue el tiroteo masivo número 385 en Estados Unidos este año, según Gun Violence Archive. Ha sido el más letal de los 45 tiroteos en escuelas ocurridos en lo que va de año.
El sheriff del condado de Barrow, Jud Smith, ha señalado que la comunidad "tiene el corazón roto (porque) una persona joven metió un arma en una escuela, cometió un acto malvado, mató a gente e hirió a muchos otros, no solo físicamente sino mentalmente".
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