EN LAS AFUERAS DE ISLAMABAD
Las autoridades paquistaníes han detenido por supuesta falsificación de pruebas al imán musulmán que había acusado de blasfemia a la adolescente cristiana Rimsha Masih, según informaron este domingo fuentes policiales.
Rimsha Masih, vecina de un barrio humilde de Mehrabad, a las afueras de Islamabad, fue encarcelada a mediados del pasado mes de agosto después de que algunos vecinos musulmanas la acusaran de haber quemado parte del libro 'Noorani Qaida', un manual infantil de introducción al Islam que contiene versículos del Corán.
Un responsable de la Policía, Munir Hussain Jafri, ha declarado a Reuters que un imán ha sido detenido después de que varios testigos, vecinos de la aldea de Masih, aseguraran que habían visto cómo el clérigo había arrancado algunas páginas del Corán y las había depositado en la mochila de la adolescente "en la que había algunos papeles quemados".
Un juez decidió ayer sábado aplazar hasta mañana lunes su decisión sobre la posible concesión de la libertad provisional a la joven, a causa de ciertas dudas sobre las pruebas.
Las leyes contra la blasfemia de Pakistán castigan duramente, sin descartar la pena de muerte, a quienes hablen mal sobre el Islam o el profeta Mahoma y a quienes profanen o quemen partes del Corán, el libro sagrado musulmán.
Las organizaciones de Derechos Humanos consideran que el lenguaje ambiguo con el que está redactada la ley ha conducido a abusos y a la marginación de las minorías religiosas. Aunque se han dictado varias condenas en aplicación de esa ley, nunca se ha llegado a ejecutar a nadie, pero sí se han producido casos de linchamiento de personas acusadas de blasfemia por parte de grupos de fanáticos.
Grupos religiosos y laicos de todo el mundo han protestado por la detención de Rimsha Masih, sobre la cual se han publicado informaciones contradictorias respecto a su edad y salud mental. Algunos medios han dicho que tiene once años y padece Síndrome de Down, mientras que un hospital ha indicado en un informe que tiene unos catorce años, que su capacidad mental es inferior a la que corresponde a su edad y que no ha recibido educación.
El arresto de Masih ha desencadenado el éxodo de cientos de cristianos de la aldea de la niña, sobre todo después de que los responsables de varias mezquitas informaran a través de altavoces de lo que supuestamente había hecho la menor.
Los cristianos representan el cuatro por ciento de la población paquistaní. Según los miembros de esta comunidad, las condenas por blasfemia suelen basarse únicamente en declaraciones de testigos y normalmente se deben a venganzas personales.