LOS MIGRANTES PERMANECEN A BORDO
La Policía italiana ha detenido este sábado a la capitán alemana del barco de rescate de migrantes 'Sea Watch 3', Carola Rackete, poco después de que atracase el buque en el puerto de Lampedusa.
Tras esperar en aguas internacionales a que llegase una invitación por parte de Italia o de otro estado de la Unión Europea que quisiese aceptar el barco, Rackete decidió zarpar hacia la isla de Lampedusa, aunque ha sido bloqueada por buques del Gobierno italiano.
Sin embargo, en la madrugada de este sábado, Rackete consiguió entrar al puerto a pesar de la fuerte presencia policial. Posteriormente, un vídeo de televisión ha mostrado como la capitana de este buque era detenida. La televisión estatal RAI ha señalado que Rackete había sido arrestada por "resistirse a un barco de guerra" lo que, según este medio, conlleva una pena de hasta 10 años de prisión.
Por el momento los migrantes permanecen en el barco, mientras que Rackete está siendo investigada por infringir las leyes del país sobre los barcos de rescate no gubernamentales. "En este momento el 'Sea Watch 3' está entrando en el puerto de Lampedusa. Han pasado casi 60 horas desde que declaramos el estado de emergencia. Nadie escuchó. Nadie asumió la responsabilidad. Una vez más, depende de nosotros, de la capitana Carola Rackete y su tripulación, llevar a las más de 40 personas que hay a bordo a un lugar seguro", señaló la organización a través de la red social Twitter.
La presidenta de esta institución, Johannes Bayer, ha destacado que están "muy orgullosos" de su capitana. "Ella ha hecho lo correcto. Ha defendido la ley del mar y ha llevado a la gente a un lugar seguro", ha añadido.
Sea Watch rescató el 12 de junio a 53 personas en aguas internacionales frente a las costas de Libia. Hasta ahora, Italia solo había permitido el desembarco de once de ellas, pero a última hora del jueves autorizó dos nuevas evacuaciones, las de un migrante que sufría fuertes dolores y su hermano.
La ONG ha recibido nuevas críticas este viernes por parte del ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, artífice de la política de "puertos cerrados". El líder de la Liga se ha referido de nuevo al tema en una entrevista televisada en la que ha acusado a Sea Watch de "crear una polémica política a costa de 42 personas".
En este sentido, ha defendido que, si por él fuera, el barco quedaría bloqueado, la tripulación sería expulsada y los migrantes, evacuados a otros países europeos. Además ha insistido en su política en contra de las ONG aludiendo a la "tendencia positiva" en el número de muertes y llegadas de migrantes.
En lo que va de año, han perdido la vida en la zona central del Mediterráneo más de 340 migrantes y refugiados, según un reciente balance de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Salvini celebra la detención de Rackete
El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, celebró la detención de la capitana del barco de la ONG Sea Watch, Carola Rackete, a la que acusó de "comportamiento criminal" por haber puesto en peligro la vida de los agentes de la Guardia di Finanza durante su maniobra para atracar en el puerto de la isla italiana de Lampedusa.
Salvini, que había impedido la entrada en el puerto del barco humanitario con 40 personas rescatados hace 17 días, se mostró satisfecho porque se han cumplido sus peticiones de arresto de la capitana, la incautación del barco y la reubicación de los migrantes en países de la Unión Europea.
En declaraciones en la radio pública italiana RAI1, Salvini aseguró que los migrantes irán a cinco países de la UE, aunque no los citó, y atacó al Gobierno holandés por "su vergonzosa indiferencia" respecto a un barco que lleva su bandera.