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Detenidos el padre y la madrastra de un niño asesinado hace 35 años

El menor, de 5 años, fue asesinado en 1989. La nueva tecnología ha permitido conocer sus asesinos.

Imagen de la pareja detenidaOficina del Sheriff del condado de Berkeley

Unos 35 años después de que se encontrara el cuerpo de un niño de cinco años cerca de la casa en la que residía con su familia, el padre y la madrastra del menor han sido detenidos y acusados de asesinato. Los hechos han ocurrido en el estado de Carolina del Sur, en Estados Unidos.

Victor Lee Turner y Megan Lee Turner han sido detenidos y acusados de la muerte de Justin Lee Turner en 1989. La Oficina del Sheriff del condado de Berkeley en Moncks Corner reabrió el caso sin resolver en 2021, según informó la oficina del sheriff en un comunicado.

El caso fue revisado por la "posible aplicación de tecnología nueva o no utilizada" en abril de 2021. Esto llevó a la agencia a reevaluar la evidencia física de la escena del crimen y la autopsia, según ha dicho el sheriff. Por ello, las pruebas fueron enviadas a patólogos forenses y al laboratorio forense de la División de Aplicación de la Ley de Carolina del Sur para su análisis.

La investigación condujo a cargos contra la pareja y a su arresto en su residencia en Cross Hill antes de ser transportados al Centro de Detención Hill-Finklea para su detención, según la oficina del sheriff.

Así sucedieron los hechos

Una declaración jurada proporcionada a 'CNN' dice que los Turner denunciaron falsamente la desaparición de su hijo en la oficina del sheriff el 3 de marzo de 1989. Alegaron que había desaparecido en el autobús escolar que le transportaba. Sin embargo, varios testigos confirmaron que el niño nunca estuvo en el autobús ni asistió a la escuela ese día.

Los investigadores creen que el niño fue asesinado a última hora de la tarde del 2 de marzo o temprano durante la mañana del 3 de marzo de ese año.

Dos días después de su desaparición, los detectives encontraron el cuerpo de Justin dentro de la camioneta de la pareja en la propiedad familiar, según declaraciones juradas. "La ubicación específica dentro de la caravana donde el delincuente ocultó el cuerpo sugiere altamente familiaridad con la caravana y su plano de planta", asegura el documento. Asimismo, indica que solo la pareja tenía las llaves para darles acceso al vehículo.

La investigación de la escena del crimen, el análisis forense y los resultados de la autopsia han establecido que Justin "murió por asfixia debido a estrangulamiento por ligadura poco tiempo después de consumir su última comida". Además, que los Turner fueron las "últimas y únicas personas" que vieron a su hijo con vida e interactuaron con él antes de su muerte.

El análisis de laboratorio forense de la División de Aplicación de la Ley de Carolina del Sur ha determinado que la ligadura encontrada dentro de la residencia de los Turner tiene las características físicas capaces de causar heridas de estrangulamiento en el cuello del niño. La evidencia de fibra recolectada de la ligadura ha hallado que era "física y químicamente" consistente con el material tomado del interior del cuello de la camisa del niño.

La investigación determinó que la ligadura recuperada de la residencia era "un arma probable utilizada para estrangular y matar intencionalmente a la víctima", asegura la declaración jurada.