Eslovaquia
El hombre de 71 años se ha declarado culpable y podría enfrentarse a una pena mínima de 25 años de cárcel.
Mientras el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, sigue en estado grave tras ser tiroteado en plena calle, este sábado comparece ante el juez el detenido. Ante el tribunal, el hombre de 71 años se ha declarado culpable y podría enfrentarse a una pena mínima de 25 años de cárcel. La Policía también ha registrado su vivienda en las últimas horas. Fico acaba de superar una segunda cirugía.
Esta segunda cirugía de dos horas a la que se sometió Fico ara poder extraer tejido muerto de sus múltiples heridas de bala "contribuyó a un pronóstico positivo", según la ministra de Salud, Zuzana Dolinkova. El primer ministro eslovaco sigue en el hospital universitario F. D. Roosevelt en Banska Bystrica.
Robert Fico, cercano al Kremlin, fue tiroteado el miércoles mientras saludaba a sus partidarios tras una reunión de su ejecutivo en Handlova. La Policía llevó el viernes al detenido a su domicilio, en el pueblo de Levice, y se incautó de una computadora y varios documentos, de acuerdo con la televisora estatal, Markiza.
El vicepresidente del Gobierno, Robert Kalinak, confirmó que hay mejoría. Lo dijo después de que la cirugía del viernes "fuera exitosa y la condición del paciente sea estable". Eso sí, descartó un traslado inmediato a Bratislava desde el hospital en el que se encuentra.
El trabajo del Ejecutivo se mantendrá "según lo ha establecido, es decir, que habrá dos consejos de ministros semanales", aclaró el vicepresidente. Para este martes están convocados los líderes de todas las formaciones parlamentarias a una mesa redonda en el Palacio Presidencial para emitir un mensaje de tranquilidad a la nación.
El atacante consiguió disparar hasta en 5 ocasiones. El exjefe de la policía Stefan Hamran cuestionó el dispositivo y criticó la "reacción tardía" de los guardaespaldas. "En lugar de lanzarse contra el atacante y utilizar incluso sus cuerpos como escudos, intentaron esquivar las balas", defendió.
Otro experto en seguridad, Juraj Zábojník, vaticinó: "Van a rodar cabezas". Más que en la actuación de los guardaespaldas durante el tiroteo, Zábojník lamenta los fallos de inteligencia, que no fue capaz de anticipar el ataque de un agresor radicalizado, aunque sin pasado criminal y que tampoco participaba en redes locales. Sin embargo, el viceprimer ministro, Robert Kalinak, dice: "No veo ningún motivo para la dimisión del ministro del Interior."
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