Un hacker consiguió acceder al sistema de agua de la ciudad de Oldsmar, en Florida, y trató de envenenar el suministro aumentando la cantidad de hidróxido de sodio, comúnmente utilizada para la soda o la lejía. Un trabajador de la planta detectó el fallo y revirtió la acción.

La lejía se usa en pequeñas cantidades en el agua para controlar la acidez, pero un aumento considerable podría haber causado problemas en la salud de quien la consuma.

El pasado viernes, un pirata informático de procedencia desconocida consiguió acceder de forma remota al ordenador que controla el sistema de tratamiento del agua. Uno de los operadores de la planta de Florida detectó el intento del hacker por la mañana, dando por hecho que se trataba, en un principio, de la acción de un supervisor.

Sin embargo, horas más tarde, lo intentó de nuevo. Esta vez, el hacker logró llegar al software y aumentar el contenido del hidróxido de sodio de 100 partes por millón a 11.110 partes, por lo que el trabajador revirtió de manera inmediata la acción y redujo el nivel a su cantidad normal.

"En ningún momento se dio un efecto adverso significativo en el agua que se estaba tratando. Es importante destacar que los consumidores nunca estuvieron en peligro", explica el alguacil del condado de Pinellas, Bob Gualtieri, según adelanta BBC News.

Sin embargo, a su discurso añadió: "No soy químico, pero lo que sí sé es que si se pone esa cantidad de sustancia en el agua potable, no es algo bueno".

La investigación sigue en marcha y por el momento no se ha procedido a ninguna detención. Tampoco se sabe si el hacker accedió desde dentro o fuera de Estados Unidos.

Usan la lejía para drenar el agua

La planta de Oldsmar, encargada de proporcionar agua a decenas de empresas y a unos 15.000 habitantes, utiliza el hidróxido de sodio para limpiar el drenaje de líquidos. Si se supera la cantidad recomendada, puede llegar a causar irritación de la piel y ojos, además de la pérdida temporal del cabello.

Otros ataques informáticos similares

El alcalde de Oldsmar, Eric Seidel, explicó a los medios que "hay un mal actor ahí fuera".

En 2016, un informe de seguridad de Verizon reportó un ataque similar a otra instalación de agua estadounidense, mientras que en 2020 hubo múltiples ataques fallidos a los suministros de agua israelíes.

Por el momento se ha logrado la detención de todos los ataques cibernéticos aunque, según cita el alcalde, este tipo de incidentes "pone a todos en aviso".