EN BOSTON, EEUU
Las galletas de Collete tienen un ingrediente secreto, que sin duda es el que las hace ser más dulces que ninguna. Collette Divitto es una joven con Síndrome de Down de 26 años de Boston que desde muy joven supo cuál era su gran sueño en la vida: convertir su pasión por la repostería en su profesión.
Collette Divitto se puso manos a la masa y recorrió gran número de locales de Boston ofreciendo una muestra de sus galletas y pidiendo una oportunidad laboral. Sin embargo, en todos los negocios la respuesta fue siempre la misma: no. Pese a que todos manifestaron su gusto por los dulces que la joven cocinaba todos rechazaban la posibilidad de ofrecerle un puesto de trabajo por no encajar en su equipo y es que Collette tiene Síndrome de Down.
Su madre explica a cbs que cree que "todos los que la rechazaron la hicieron luchar con más fuerza por ello". Y efectivamente, con tenacidad Collete logró que Stephen DeAngelis dueño de Golden Goose Market le ofreciese un hueco en su local para vender sus galletas. Comenzó vendiendo 100 a la semana, pero después de un reportaje que le hizo la delegación de la cbs en Boston los pedidos empezaron a crecer de forma vertiginosa, hasta el punto de que ha podido inaugurar su propio negocio.
Collete asegura que es su "sueño hecho realidad", está tan feliz que ha confesado ese ingrediente secreto que hace a sus galletas tan especiales: "el amor".