AFGANISTÁN | TRES SUICIDAS
Un coche bomba fue detonado a las puertas del edificio por uno de los terroristas, mientras los otros dos entraron en el hotel y abrieron fuego contra las fuerzas afganas.
Dos horas después del tiroteo se inmolaron con las cargas explosivas que llevaban adosadas a su cuerpo.
Los cuatro guardas de seguridad fallecidos habían sido contratados por una compañia de seguridad alemana. De la decena de heridos, nueve son civiles y uno es un policía.
Es un hotel frecuentado por personas procedentes del exterior de Afganistán, pero por el momento se desconoce si hay algún extranjero entre los heridos.
Los talibanes reclaman la autoría del atentado
Un portavoz talibán, Zabihulá Mujahid, ha asumido la autoría del atentando.
Hans Spehling, portavoz de la empresa alemana, señaló que "según las informaciones, no se trata de un ataque contra GIZ, parece que es un ataque contra la compañía de seguridad local".