Casa real británica
Desde las acusaciones de racismo dentro de la casa real británica, hasta los pensamientos de suicidio por parte de Meghan Markle, pasando por la pérdida de protección sobre su hijo... La relación entre Buckingham y los duques de Sussex nunca fue buena.
El 19 de mayo de 2018, Windsor era escenario de lo que parecía un nuevo cuento de hadas... Pero las sonrisas se fueron desvaneciendo poco a poco. La adaptación de Meghan Markle a la vida palaciega de la familia real británica no iba a ser nada fácil.
Apenas un año después, la exactriz ya tenía un apodo dentro de la familia real, el de 'la difícil'. Se tachaba a Meghan Markle de ambiciosa, complicada, de acosar a los empleados de Buckingham... y de 'manirrota'. Hay quien la llegó a apodar 'MeghAntonieta'.
El nacimiento de Archie, en mayo de 2019, no sirve para calmar las aguas dentro del Palacio de Buckingham y la pareja decide hacer las maletas y migrar a América. consideran "insoportable" el intrusismo de la prensa.
Durante la entrevista concedida a Oprah Winfrey, Harry y Meghan hablan de racismo dentro de Buckingham y acusan a un miembro de la familia real de cuestionar cómo de oscura sería la piel de su hijo Archie.
También denuncian la pérdida de la protección real, sobre todo para su hijo, además de un sinfín de desaires, al que se suma un aborto el verano pasado, que lleva a Meghan Markle a pensar en el suicidio.