EN LA REPÚBLICA CHECA
Volar en una bici está cada vez más cerca, la prueba es un prototipo de bici voladora. Se acaba de presentar en esta sala de exposiciones de Praga. Ha estado cinco minutos en el aire gracias a cuatro hélices impulsadas por seis baterías eléctricas.
De momento se dirige por control remoto pero la idea es que sea propio el ciclista el que la controle, Jan Spatny, piloto: "No es como manejar un juguete por control remoto. Es más complicado. Hay que tener en cuenta que pesa 95 kilos".
Para esta prueba se ha utilizado un maniquí. Son necesarias baterias más potentes para probarlo con un ser humano. Ese es el gran reto, además de conseguir una mayor autonomía. Milan Duchek, director técnico Duratec Bicicletas: "Lo que más limita es la capacidad de las baterías. Pero esperamos tener en el futuro capacidad suficiente para usar la bici en deportes, turismo u otras cosas".
Tres empresas checas se han unido para crear esta máquina. Dicen que se han inspirado en los libros de aventuras y de ciencia ficción y que su motivación no ha sido obtener un beneficio económico sino cumplir un sueño de la infancia. Hasta el momento sólo el cine lo había hecho realidad.