HA RECIBIDO MÚLTIPLES CRÍTICAS
Un millonario australiano y magnate inmobiliario ha lanzado un consejo para los 'millenials' que luchan cada día para ahorrar y comprar una casa. Se trata de una recomendación muy simple: dejad de comprar tostadas de aguacate.
Tim Gurner es un agente inmobiliario de lujo en Melbourne, responsable de proyectos de más de 3.800 millones de dólares y que ahora se enfrenta a las críticas por su comentario en un programa de televisión de Australia en el que criticaba a los jóvenes por estar comprando 'tostadas de fantasía y café caro' cuando no pueden ahorrar para comprar una vivienda.
Las expectativas de los jóvenes son muy altas".
"Cuando trataba de comprar mi primera casa no estaba gastando 20 euros por un aguacate aplastado y cuatro cafés a 5 euros cada uno", dijo el joven, que añadió que "estamos en un punto en el que las expectativas de los jóvenes son muy altas".
Añadió además que estamos adentrándonos en una nueva realidad en la que "mucha gente no tendrá una casa en su vida" y aseguró que está seguro de que los jóvenes no podrán adquirir una vivienda nunca porque están gastando mucho dinero en "aguacates y cafés" sin ni si quiera trabajar, según recoge The Guardian.
El ejecutivo de 35 años comparó además esta situación con la que él vivió cuando era joven. "Cuando tuve mi primer negocio tenía 19 años. Iba al gimnasio a las 6 de la mañana y acababa de trabajar a las 10.30 de la noche durante siete días a la semana y lo hice hasta que pude permitirme comprar mi primera casa" explica.
Pese a las críticas, Gurner no es el primero en sugerir que la pasión de los jóvenes por el aguacate, como metáfora de una vida cara y de cara a las redes sociales, hace más difícil la adquisición de viviendas.
El demógrafo Bernard Salt escribió en un periódico que si los jóvenes dejaban de ir a las cafeterías de 'hipsters', podrían comprar propiedades. "He visto a jóvenes pidiendo aguacate con queso desmenuzado en un pan tostado de cinco cereales por 25 euros" y continúa explicando que él podría permitirse este desayuno porque ya tiene una edad y una familia criada, pero se pregunta "¿cómo pueden los jóvenes darse el lujo de comer así? ¿No deberían ahorrar comiendo en casa? 20 euros varias veces a la semana podrían ir a un depósito de una casa", decía su artículo.