Francia
El sospechoso había sido condenado a siete años de prisión por una violación y estaba en libertad mientras se tramitaba su expulsión.
Un asesinato a una joven estudiante en París, que fue encontrada enterrada en un bosque el pasado fin de semana, ha conmocionado al país entero. También ha agitado a la política francesa y al nuevo gobierno galo, cuyo futuro depende de la voluntad de los partidos de extrema derecha.
El presunto autor de la muerte de la joven sería un hombre marroquí que se encontraba bajo orden de expulsión. Ahora tiene tiene 22 años y llegó a Francia desde España con 17. A los pocos meses, fue condenado por una violación a siete años de cárcel y a la expulsión del país.
Salió de prisión el 20 de junio de 2024 y estaba bajo orden de expulsión, por lo que fue trasladado a un centro de retención. Sin embargo, un juez el pasado 3 de septiembre decidió dejarlo en libertad mientras conseguía la ejecución de esa expulsión.
El condenado por violación incumplió el control judicial al que estaba sometido al no acudir a fichar a comisaría como se había establecido. Después de que las autoridades de Marruecos dieran su visto bueno para expulsarlo de Francia, pasó a ser incluido en la lista de personas buscadas del país
Una estudiante de la Universidad París Dauphine, una chica de 19 años, desapareció el pasado día 20 por la tarde a la salida de las clases junto al bosque de Boulogne, donde apareció semienterrada al día siguiente, recoge 'EFE'. Recientemente ha sido detenido en Ginebra a petición de las autoridades francesas, que van a solicitar la extradición a Suiza.
El presidente de la Agrupación Nacional (RN), Jordan Bardella, reaccionó a la detención del sospechoso de asesinar a la joven estudiante: "A Phlippine le robó la vida un migrante marroquí pendiente de expulsión", dijo en su cuenta de 'X'.
"A Philippine le robó la vida un migrante marroquí al que se le había expedido una OQTF. Este migrante no tenía nada que hacer en nuestro suelo, pero pudo reincidir con total impunidad. Nuestra justicia es laxa, nuestro Estado es disfuncional y nuestros dirigentes permiten a los franceses vivir con bombas humanas. Es hora de que este gobierno actúe: nuestros compatriotas están enfadados y no tendrán pelos en la lengua", se puede leer en el mensaje publicado por Bardella en sus redes sociales.
El secretario de Estado de Ciudadanía y de Lucha contra las Discriminaciones, Othman Nasrou, aseguró que lo ocurrido "es absolutamente atroz" y que su asesinato es "un crimen innoble". En una entrevista al canal CNews aseguró que el sospechoso quedó en libertad y en situación de vigilancia "a pocos días" de la llegada de la autorización de Marruecos "que habría permitido su expulsión".
Mientras tanto, la oposición, el primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, señaló en BFMTV que ese trágico suceso "se podría haber evitado" y que primero se tendrá que saber por qué salió de la cárcel y por qué, al ser internado en un centro de retención, un juez lo dejó libre bajo control judicial. "No hay que generalizar (...) Cuando hay alguien que constituye una amenaza, no debería ser liberado antes de asegurarse de que se le expulsa y hasta entonces habría que mantenerlo en prisión", añade.
La diputada ecologista Sandrine Rousseau, afirma estar "inquieta" al considerar que la extrema derecha aprovechará "para extender su odio racista y xenófobo" y añade en su cuenta de 'X' que la chica fue asesinada "de forma salvaje".
"Fue brutalmente asesinada. La persona detenida es un marroquí dependiente de la OQTF. Este feminicidio merece ser juzgado y castigado severamente. La extrema derecha intentará aprovecharse de ello para difundir su odio racista y xenófobo", asegura en la red social de Elon Musk.
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