El caso del coronel Russell Williams, que se declaró culpable del asesinato de dos mujeres y de violar a otras dos, tiene conmocionada a Canadá y, especialmente al estamento militar, a medida que se conocen más detalles de sus crímenes.
Hasta hoy, las autoridades y los tribunales canadienses habían evitado pronunciarse sobre los detalles del caso de Williams, quien había sido acusado de dos asesinatos, dos violaciones y 82 robos en domicilios particulares.
Los tribunales canadienses habían prohibido a los medios de comunicación publicar cualquier detalle revelado durante las vistas y documentos judiciales producidos desde que Williams fue arrestado el pasado 7 de febrero en Ottawa.
Pero con la admisión que hoy realizó el coronel de la Fuerza Aérea canadiense al responder con un "culpable, su señoría" ante los cargos de asesinato de dos mujeres y la violación de otras dos, algunos de los detalles más escabrosos del caso se han empezado a conocer.
Williams, según expusieron hoy fiscales durante la vista judicial, pasó en dos años y medio de entrar en domicilios particulares para robar ropa interior de mujeres y husmear entre sus pertenencias más personales, a grabar en vídeo las sesiones de tortura y muerte a las que sometió a sus víctimas.
Además, de acuerdo con los fiscales, todo fue documentado, con meticulosidad por el coronel.
En miles de fotos almacenadas en su ordenador, y que los tribunales consideraron "profundamente perturbadoras", Williams aparece en los domicilios de sus víctimas ataviado con la ropa interior que luego robaba y, en algunas ocasiones, masturbándose delante de la cámara.
Y, en al menos una ocasión, Williams robó la ropa interior y se fotografió en la habitación de una niña de 12 años, cuya familia era vecina de Williams y su mujer. El coronel almacenó tantas prendas femeninas que en varias ocasiones se quedó sin espacio en su garaje y tuvo que quemar la ropa.
Pero estos robos no fueron suficiente para el coronel, que en el momento de su detención era el comandante de la mayor base aérea del país, CFB Trenton, y en su glorioso historial militar cuenta con haber sido el piloto de la reina de Inglaterra, del primer ministro canadiense y otros altos dignatarios de Canadá y el extranjero.
"Quería asumir más riesgos" reconoció el coronel a sus interrogadores. Así que a finales de 2009, Williams pasó a cometer abusos sexuales y posteriormente, a asesinar.
En los dos ataques sexuales, el coronel entró en la casa de las víctimas mientras éstas dormían, las desnudó, cubrió sus cabezas con la cubierta de una almohada, las ató a sillas y las fotografió.
Sobre los dos asesinatos, la Fiscalía canadiense confirmó hoy que Williams grabó en vídeo la totalidad de la muerte, en 2009, de la cabo Marie-France Comeau, de 38 años de edad, una de sus subordinadas en la base de Trenton.
El segundo asesinato, en 2010, de Jessica Lloyd, de 27 años y empleada en una empresa de autobuses, fue registrado parcialmente por el coronel. Las dos grabaciones serán presentadas por la Policía ante el juez del caso el martes y probablemente serán destruidas.
Inmediatamente después de que Williams reconociera ante el tribunal de Belleville (a unos 180 kilómetros al este de Toronto) su culpabilidad, el Ejército canadiense inició el procedimiento para expulsarlo.
"Los trágicos eventos referentes al coronel Russell Williams han dejado estupefactos a todos los canadienses y especialmente a los miembros de las Fuerzas Armadas" afirmó el Jefe del Estado Mayor, general Walt Natynczyk, a través de un comunicado dado a conocer hoy.
"Una vez que sea condenado formalmente, estaremos en posición de empezar oficialmente el proceso administrativo que concluirá con la baja del coronel Williams de las Fuerzas Armadas", añadió.
La pena le será notificada a finales de semana.
Los crímenes cometidos por Williams suponen una condena automática de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional hasta dentro de 25 años.