Coronavirus China
Zhang Zhan, periodista china, ha sido condenada a cuatro años de prisión por "provocar altercados y buscar problemas" debido a las informaciones sobre el brote del coronavirus en Wuhan al comienzo de la pandemia.
Un abogado apunta que Zhang no quiso aceptar los cargos ya que consideraba que sus informaciones sobre el coronavirus eran completamente ciertas. Según Amnistía Internacional, su trabajo periodístico en Wuhan fue informar de detenciones de otros reporteros independientes y el acoso a familiares de víctimas de la pandemia.
La organización por los Derechos Humanos de China informó en septiembre que Zhan había sido detenida por publicar que los ciudadanos de Wuhan habían recibido comida podrida durante el confinamiento de la ciudad o que tenían que pagar para poder hacerse pruebas del coronavirus.
La periodista inició en septiembre una huelga de hambre ha provocado que su estado físico sea "muy débil". Al parecer, sus abogados aseguran que la alimentan forzosamente mediante un tubo y le obligan a llevar grilletes continuamente.
La Fiscalía le acusaba de "publicar repetidamente un gran número de informaciones falsas", además de querer "exagerar maliciosamente la información" y aceptar varias entrevistas con medios extranjeros. Las organizaciones que velan por los derechos humanos consideran ''alarmante'' la condena y aseguran que Pekín quiere "intimidar a otros para que no llamen la atención sobre la situación de la pandemia en Wuhan a principios de año".
Por otra parte, AI Gwen Lee, activista china aseguró que "los periodistas ciudadanos como Zhang Zhan fueron la fuente primaria, si no la única, de información de primera mano y sin censura durante los primeros días de la COVID-19". Además, advirtió al gobierno chino de que dejara de perseguir a los periodistas chinos solo por informar sobre la verdad.