SEGÚN DETALLA LA CNN
El hombre del estado de Idaho que admitió el pasado mes de septiembre haber intentado asesinar al presidente Barack Obama al disparar contra la Casa Blanca ha sido condenado a 25 años de prisión. Había sido acusado inicialmente de 17 cargos criminales, según detalla la cadena estadounidense CNN.
Oscar Ramiro Ortega-Hernández, de 23 años, compareció por primera vez ante los tribunales hace dos años tras ser acusado de disparar desde la ventana de su coche --la noche del 11 de noviembre de 2011-- al menos dos balas contra la Casa Blanca, una de las cuales alcanzó una ventana, según indicaron en aquel momento los servicios secretos.
El sospechoso intentó huir hacia un puente que conduce a los suburbios de Virginia, cuando la Policía acudió al lugar de los hechos, pero se estrelló con su vehículo e intentó escapar a pie. El Gobierno dijo que sus huellas dactilares se encuentran en revistas que se encontraban en el coche, pero no en el arma, que también se quedó en el vehículo siniestrado.
"Este hombre condujo a través del país para disparar con un rifle de asalto a la Casa Blanca" dijo el fiscal Ronald Machen, cuya oficina procesó el caso. "Estaba motivado por el odio hacia el presidente y el deseo de iniciar una revolución contra el Gobierno federal", ha apostillado. Sin embargo, esa noche ni el presidente ni su familia se encontraban en la Casa Blanca.
"Tuvimos suerte de que sus ninguna de sus balas alcanzase a alguno de los agentes del servicio secreto custodiaban la Casa Blanca esa noche. Esta pena de prisión de 25 años demuestra que cualquiera que planifique de esta forma un acto de violencia debe esperar pasar décadas tras las rejas", ha sentenciado Machen.