EN ISLANDIA
Esta semana la organización ecologista Sea Shepherd denunciaba que la compañía ballenera comercial de Islandia Hvalur 8 había matado a una ballena azul, la especie conocida como el animal más grande de la Tierra y que está en peligro de extinción.
La organización aseguró que basaba su denuncia en unas fotografías tomadas por los voluntarios de la estación ballenera Hvalur (Islandia) y revelan que la captura del cetáceo se habría producido el pasado 7 de julio con el fin de exportarla a Japón.
Esto se produce después de que la compañía reanudara la caza en junio tras un paréntesis de tres años. Todo apunta a que la compañía habría matado a 22 ballenas desde el inicio de la temporada de caza.
Sin embargo, según recoge el medio 'The Guardian', el director gerente de la compañía aseguró que tal información no era cierta. "Nunca hemos capturado una ballena azul en nuestras aguas desde que estaban protegidas. Los vemos en el océano. Cuando te acercas a una ballena azul, es tan distinta que la dejas en paz", aseguraba.
La compañía se defiende asegurando que la ballena era un híbrido de ballena de aleta azul. "Es imposible confundir una ballena azul con una ballena de aleta, esta ballena tiene las características de una ballena de aleta en el océano", dice.
Sin embargo los expertos aseguran que el animal desplomado en la estación ballenera en Hvalfjordur, Islandia, tiene todas las características de una ballena azul, tal y como revelan las fotografías tomadas por los balleneros: la piel moteada de color azul, la barba negra y la relativamente pequeña aleta dorsal.
La organización en defensa de las ballenas recuerda que las actividades comerciales de caza de ballenas está prohibida y que tanto las ballenas azules como los rorcuales comunes son especies protegidas.