ESTA TARDE SE CELEBRA LA VOTACIÓN
La Comisión Europea (CE) espera el voto de la Cámara de los Comunes británica en relación al Brexit y no desea entrar en más consideraciones al respecto en este momento del proceso puesto en marcha.
Así se expresó el portavoz-jefe de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, tras la cumbre sobre el Brexir celebrada el domingo en Bruselas, donde se aprobó el acuerdo de retirada de Reino Unido de la Unión Europea (UE) y la declaración política sobre la futura relación entre las partes.
Tras indicar que la llamada 'Task Force 50' que lidera el negociador europeo, Michel Barnier, sigue trabajando y preguntado sobre la eventual preparación de la CE ante cualquier resultado del voto en el Parlamento británico, Schinas afirmó que Bruselas no tiene nada que comentar después de la cumbre del domingo.
"Todo el mundo habló ayer: (Jean-Claude) Juncker (presidente de la CE), Barnier... La posición de la Comisión es conocida, pública, así que no diré nada más. Ahora esperaremos el significativo voto en la Cámara de los Comunes", añadió.
Respecto al papel de Barnier de ahora en adelante, el portavoz-jefe comunitario dijo que reiteraba que la 'Task Force 50' tiene "importantes tareas por delante para preparar la implementación del acuerdo de salida y el trabajo organizativo para que la UE empiece las negociaciones sobre la relación futura tan pronto como sea posible tras la retirada".
"Michel Barnier y su equipo seguirán aquí disponibles, mientras el proceso del artículo 50 está en marcha. Esto me da la oportunidad de decir que Juncker ayer públicamente expresó otra vez su agradecimiento al trabajo hecho por Michel Barnier y su equipo", dijo Schinas.
Este domingo los líderes de la Unión Europea dieron su respaldo político al acuerdo de retirada del Reino Unido del club comunitario y a la declaración política sobre las futuras relaciones entre Bruselas y Londres. Este acuerdo de salida y la declaración sobre la relación futura deben ser aprobados en Consejo de ministros de la UE por los 27 Estados que permanecerán en la Unión, aunque todavía no hay fecha para ello.
En este trámite se requiere mayoría cualificada reforzada; es decir, que al menos el 72% de los países vote a favor y que esos Estados representen al menos el 65% de la población de la Unión. El acuerdo de retirada se debe someter al llamado voto significativo del Parlamento británico y está previsto que esta votación, que tendrá lugar después de un debate sobre el asunto en la Cámara de los Comunes, se celebre en diciembre y se baraja que pueda celebrarse en la segunda semana de ese mes.
En este contexto y para que el acuerdo salga adelante necesita recibir el apoyo de al menos 320 parlamentarios británicos, algo que no está garantizado después de que más de 80 diputados conservadores hayan adelantado que no votarán a favor, así como los diez del norirlandés Partido Democrático Unionista (DUP), socio del Gobierno de Theresa May.