PEKÍN HABÍA ORDENADO SU DEMOLICIÓN
Ha comenzado ya la demolición del monte de piedra que un ciudadano chino se había construido en la parte superior de un edificio de apartamentos de Pekín. La enorme estructura, adornada incluso con piedras y una escultura, fue denunciada por parte de los vecinos al comprobar que había grietas en el inmueble.
Los trabajadores han comenzado ya a derribar las parras y otros elementos decorativos que hay instalados en el falso monte, después de que el ayuntamiento de Pekín decidiese ordenar su derribo.
El propietario recibió la orden de desmantelar la construcción, cuya extensión se estima en 800 metros cuadrados, y que había sido construída alrededor de su ático dúplex de 340 metros cuadrados en la parte superior del edificio.
Los vecinos se quejaban además de los ruidos emitidos durante la construcción y de la falta de seguridad con el peso del falso monte.
La polémica ha atraído a numerosos visitantes, tanto locales como extranjeros, que han querido ver por sí mismos la construcción ilegal.