CRISIS MIGRATORIA
La ciudad de Bodrum se ha visto invadida por millares de refugiados, en su gran mayoría sirios, que se amontonan en las calles de la turística localidad turca.
Las autoridades, que se han visto completamente desbordadas, aseguran que los inmigrantes están esperando su turno para lanzarse al mar en pateras con destino a la isla de Kos en Grecia.
No obstante, de su drama hay quién busca sacar provecho.
Se trata de los comerciantes de este turístico puerto, que han comenzado a vender artículos, a precios desorbitados, dirigidos a los refugiados: Chalecos salvavidas, bolsas impermeables para proteger objetos como los móviles, cremas de protección solar, remos, balsas hinchables y un sin fin de artículos dirigidos a la supervivencia en el mar.
Se calcula que a día de hoy en Bodrum se amontonan más de 100.000 refugiados, que tienen como objetivo cruzar los casi 24 kilómetros de mar que separan los dos países.
Por su parte, la isla de Kos recibe unos 2.000 inmigrantes al día.