LLEGÓ A CAMBIAR SU BILLETE 300 VECES
El hombre en cuestión no llegó a usar el billete, pero sí se aprovechó del derecho de poder comer en la sala VIP durante casi un año. La compañía advirtió que un pasajero había cambiado su pasaje más de 300 veces en un mismo año sin llegar a efectuar el vuelo nunca y observando que sí había comido y bebido con dicho billete, según publica el diario Kwong Wah Yit Poh.
Lo curioso del asunto es que una vez descubierta la trama el pasajero consiguió el reembolso del importe del billete y la compañía no ha podido emprender acciones legales contra él porque existe un vacío legal al respecto.