PRESIÓN SOBRE EL RÉGIMEN DE BASHAR AL ASAD
"Ésta es la fase final. Caerán muy pronto", ha declarado el presidente del Consejo Nacional Sirio, Abdelbasset Seida, en Doha, la capital de Qatar. A su juicio, el ataque marca "un punto de inflexión en la historia de Siria" porque generará "más presión sobre el régimen" del presidente Bashar al Assad y "llevará al fin muy pronto, en cuestión de semanas o meses".
George Sabra, un portavoz del CNS, ha declarado durante una visita a la ciudad italiana de Milán que "esta operación es el principio del fin" y que espera que aumente el número de militares que desertan del Ejército y se unen a las fuerzas rebeldes. El ataque ha sido reivindicado, por separado, por el Ejército Libre Sirio, la principal organización armada rebelde del país, y por un grupo islamista llamado Liwa al Islam.
Pero Sabra no ha querido entrar en detalles sobre la autoría del atentado. "No es relevante el dato sobre los individuos que llevaron a cabo la operación, lo importante es que lo hicieron activistas revolucionarios y el Ejército Libre Sirio", ha dicho.
Por otro lado, el portavoz ha señalado que el Consejo de Seguridad de la ONU debe actuar con más rapidez que el representante especial de Naciones Unidas y la Liga Arabe para Siria, Kofi Annan. "Los tres últimos meses de la misión del señor Annan nos han costado más de 3.000 víctimas. No podemos pagar ese precio de nuevo", ha subrayado.