DETENIDO EL PIRÓMANO QUE PUDO PROVOCAR LAS LLAMAS
El gran incendio que quema desde hace dos semanas en el norte de California (EE.UU.), uno de los peores de la temporada y por el que han sido evacuadas miles de personas, ha obligado a cerrar a seis escuelas de la zona a causa del peligro que el humo supone para los niños.
El Departamento Forestal y de Protección ante el Fuego de California, CalFire, ha asegurado que los seis centros escolares del condado de Placer cancelaron las clases a causa de la contaminación del aire de la zona.
El fuego de King fue declarado el sábado 22 de septiembre, y desde entonces ha quemado sin control hasta convertirse en uno de los más devastadores de este año.
Las llamas han obligado a desalojar de sus casas a unas 3.000 personas y mantienen cortada la carretera 50, una de las más transitadas del área y que supone una vía principal entre Sacramento (la capital del estado) y el vecino estado de Nevada.
El fuego, contra el que luchan 5.557 bomberos y veinte helicópteros, sólo ha podido ser contenido en un 18 %, y tras avanzar con fuerza la pasada madrugada, ya ha calcinado 35.450 hectáreas (87.592 acres).
Además, ya ha destruido diez casas y otros veinte edificios, y mantiene bajo amenaza a 12.000 hogares, según los bomberos.
El pasado jueves fue detenido un hombre de 37 años y vecino de la zona como presunto causante del incendio, Wayne Allen Huntsman, calificado de "pirómano" por la fiscalía y que ahora permanece en prisión a la espera del juicio bajo una fianza de diez millones de dólares impuesta por el juez.