Política monetaria BCE
La nueva presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, considera que la entidad debe revisar su estrategia de política monetaria y qué herramientas han funcionado mejor, al mismo tiempo que se ha comprometido a vigilar de cerca los preocupantes efectos secundarios.
Tras la reunión del Consejo de Gobierno, la primera reunión que preside, Lagarde ha mostrado cierto optimismo respecto a la situación económica pero muy cauteloso.
“No sobre interpreten, no anticipen, no hagan referencias. Voy a ser yo misma, probablemente diferente”, ha dicho Lagarde a los periodistas antes de empezar el turno de preguntas. “De una vez por todas, no soy una paloma”, ha añadido en referencia al sobrenombre que el argot de BCE asigna a los partidarios de política monetaria impulsora de tipos de interés, “ni un halcón” en referencia a los que promueven un endurecimiento monetario, entre ellos, Alemania. ). “Mi ambición es ser un búho, que se se asocia a menudo con una cierta sabiduría”, ha resuelto la exgerente del Fondo Monetario Internacional.