OCURRIÓ AL SUROESTE DE CHINA
Un chino, de apellido Zhang, ha vivido una auténtica pesadilla en carretera. Este hombre no se paró a socorrer a una mujer herida en la carretera y, según relata The Telegraph, más tarde se dio cuenta que la herida era su madre.
Todo ocurrió cuando el hombre acudía a visitar a su madre. En mitad del trayecto se topó con una mujer ensangrentada en la carretera y no paró para ayudarla por miedo a ser robado. Pero al llegar a casa de su madre y no encontrarla allí Zhang decidió dar media vuelta y regresar al lugar del accidente.
Al llegar descubrió que la mujer accidentada era su madre. Zhang llamó a una ambulancia, pero su madre murió en el camino hacia el hospital. Pese a que no había consuelo para Zhang, la policía le comunicó posteriormente que habían encontrado al conductor autor del atropello.
La pregunta es por qué Zhang no paró y ayudó a su madre al verla por primera vez. La respuesta está en que en China no es raro que las víctimas de los atropellos acusen a aquellos que intentan ayudarlas de causar el accidente para evitar hacerse cargo de la factura del hospital.
Ya ocurrió, como recuerda The Telegraph, en 2001, cuando 18 personas pasaron cerca de una niña de dos años a la que un coche acababa de atropellar sin detenerse.