HA OCURRIDO EN SUDÁFRICA
Un menor de doce años ha sido obligado a ver cómo su madre era obligada a beber gasolina mientras un hombre la sujetaba y otro se la derramaba en la boca y posteriormente le prendían fuego porque, decían, era sospechosa de brujería.
El muchacho, de 15 años, dijo al Tribunal Superior de Durban, en Sudáfrica, cómo un hombre había mantenido a su madre sujeta mientras otro la obligaba a beber gasolina y después la prendían fuego. El joven, que no ha trascendido su nombre por razones legales, afirmó que Thula Dlula y Mzuyanda Mntabo mataron a su madre con un líquido inflamable desconocido.
Explicó que primero la agredieron y luego la maniataron las manos mientras Mntambo la hacía beber algo que estaba en un recipiente de plástico de cinco litros. "No recuerdo el color, pero creo que era rojo o verde", dijo el menor ante el Tribunal.
Thembekile Ngubane, la fallecida, practicaba extraños rituales, por lo que creían que era una bruja. De hecho, tal y como cita el Daily Mail, una mujer dijo ante el Tribunal que la víctima había afeitado las cejas de su hijo y en otra ocasión cortó el pelo de varios niños para hacer hechizos mágicos.
Por todo ello, Ngubane no era querida en la comunidad de vecinos, que en alguna ocasión fue atacada con piedras y hombre intentó incluso agredirla con un martillo.
El doctor Kelly Holloway, que le realizó la autopsia a la fallecida, aseguró que Ngubane sufrió muchísimo hasta que murió considerando el alcance de sus lesiones.