REELEGIDO CON EL 55% DE LOS VOTOS

Chávez invita a Capriles a dialogar en una "amena" charla telefónica

El reelegido presidente venezolano ha apelado a la "unidad nacional" tras mantener una conversación con su principal rival en las elecciones celebradas el domingo. Capriles le ha pedido "respeto, consideración y reconocimiento a casi la mitad del país que no está de acuerdo con este Gobierno".

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ha indicado que ha sostenido una "amena conversación telefónica" con su rival en las elecciones, Henrique Capriles, y ha asegurado que ha invitado al diálogo a la oposición "respetando" las diferencias. "Créanmelo: he sostenido una amena conversación telefónica con Henrique Capriles. Invito a la Unidad Nacional, respetando nuestras diferencias", ha señalado en su cuenta en la red social Twitter.

Chávez consiguió este domingo su cuarto mandato que le permitirá gobernar el país petrolero hasta 2019. Un 55% de los venezolanos votó para que el gobernante profundice su proyecto socialista y llegue a sus 20 años en el poder, aunque la oposición recortó distancias y obtuvo un 44,39% de los votos.

Al reconocer su derrota, Capriles pidió, en unas breves palabras ante seguidores y periodistas, que "quienes hoy mantienen el poder" tengan "respeto, consideración y reconocimiento a casi la mitad del país que no está de acuerdo con este Gobierno". Por su parte, el vicepresidente primero del Partido Socialista Unido de Venezuela y titular de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, ha destacado en una conferencia de prensa que la oposición reconociera los resultados de los comicios.

Unas elecciones con ganador pero sin perdedor

Las elecciones venezolanas consagraron la extensión del mandato de Hugo Chávez al frente del Gobierno para un periodo que cuando concluya lo habrá mantenido dos décadas en el poder, pero la derrota de Capriles permite hacer lecturas que alejan el resultado del fracaso. Con una participación récord de más de un 80 % del registro electoral, Chávez ganó con 7.963.061 de votos (55 %) frente a los 6.426.286 de Capriles (44,39 %).

Chávez ganó, pero no logró los 10 millones de votos que había fijado como meta para estas elecciones; bajó siete puntos con relación a su resultado de 2006, cuando logró 7,3 millones de votos (62,84 %), si bien obtuvo un incremento de 600.000 votos pese a que el padrón electoral aumentó en 3 millones de votantes.

Capriles perdió, pero alcanzó un récord histórico de votación en unas elecciones contra Chávez, llegando cerca de los 6,5 millones de votos; prácticamente incrementó un 50 % el voto opositor con relación a los 4,3 millones de votos que obtuvo Manuel Rosales en 2006 (36,9 %), y destrozó los registros de las primarias de febrero, en las que logró poco más de 2 millones de votos.

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