UNA DE ELLAS HA FALLECIDO
Los vecinos de Dresde, una ciudad del este de Alemania, se quedaron atónitos al ver a cuatro cebras corriendo por las calles del centro. Los animales se escaparon de un circo navideño y se dirigieron hacia el parlamento estatal de Sajonia recorriendo el paseo de la orilla del río Elba.
Una de las cebras murió del estrés provocado por la persecución que siete patrullas de Policía ejecutaron para poder capturarlas y llevarlas de vuelta al circo. Un trágico suceso que vuelve a poner en el foco de la polémica la necesidad de prohibir los circos con animales.