TENSA LAS RELACIONES
Un caza F-16 de Estados Unidos ha provocado un vertido de combustible durante un aterrizaje de emergencia en Tohoku, prefectura de Aomori, en el norte de Japón. El fuel ha caído en el lago Ogawara.
El ministro de Defensa japonés, Itsunori Onodera, se ha comprometido a compensar a los pescadores afectados por el vertido, ha informado el periódico 'The Japan Times' en su edición digital. "Nos tomamos muy en serio el hecho de que los pescadores hayan tenido que dejar de faenar. Habrá una compensación", ha afirmado Onodera tras reunirse con el gobernador de Aomori, Shingo Mimura.
El incidente ocurrió el pasado martes durante un aterrizaje en la base de Misawa cuando el caza se incendió y fueron lanzados dos depósitos auxiliares de combustible al lago Ogawara.
Este incidente tensa de nuevo las relaciones entre Washington y Tokio, afectadas por la fuerte presencia militar estadounidense, princialmente en el sur del archipiélago nipón.
Este mismo viernes un helicóptero militar estadounidense sobrevoló un colegio en la isla de Okinawa y cerca de la base de Futenma pese a las promesas de que no se repetirían esos sobrevuelos. En diciembre cayó una de las ventanas de un CH-53E dentro del recinto del colegio, muy cerca de varios alumnos.