Coronavirus
Raymond Burke es una de las grandes figuras antivacunas en el seno de la Iglesia. Tras dar positivo por coronavirus, "permanece sedado y conectado a un ventilador médico".
El cardenal negacionista Raymond Burke, uno de los grandes defensores de las teorías antivacunas dentro del Vaticano, ha sido ingresado en estado muy grave en un hospital de Estados Unidos tras haberse contagiado de coronavirus.
El propio cardenal fue el que comunicó el pasado 10 de agosto su positivo en la COVID-19 a través de su cuenta de Twitter en un mensaje en el que aseguraba estar "descansando cómodamente y recibiendo una excelente atención médica". Sin embargo, el paso de los días no ha hecho sino emporar su situación, lo que ha obligado a los sanitarios a ingresarlo en un hospital en Wisconsin.
Ingresado en estado grave
La que es una de las figuras antivacunas del Vaticano se encuentra en estos momentos ingresado y en estado grave, pero estable, a causa del coronavirus.
La última actualización publicada en sus redes sociales afirma que "permanece sedado y conectado a un ventilador médico" y que recibe "una excelente atención médica y sacramental".
Muy cercano a Trump
Raymond Burke es una figura muy cercana al expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, con quien comparte sus ideas negacionistas sobre el coronavirus, ambos han llegado a calificar al coronavirus de ser el "virus de Wuhan".
Es además una de las voces críticas con la actuación del Vaticano en esta pandemia y con el papa Francisco I, a quien llegó incluso a amenazar con declararlo hereje cuando comenzó a dar la comunión a personas divorciadas. Siempre se ha mostrado en contra de todas sus medidas, como con la acogida de los homosexuales dentro de la institución.
La Iglesia anima a vacunarse
El empeoramiento de Raymond Burke coincide con la campaña iniciada días atrás por el papa Francisco y varios obispos y cardenales del continente americano en favor de la vacunación contra el coronavirus, ya que este es "un acto de amor para sí mismos, los demás y, sobre todo, los más vulnerables".
"Hoy tenemos vacunas para protegernos de la COVID-19. Ellas traen esperanza para acabar con la pandemia", aseguró el papa Francisco.