EN RUSIA
Un hombre en estado ebrio se subió al puente entre Crimea y Rusia con la intención de quitarse la vida. Cuando por fin cambió de opinión y se disponía a bajar del puente, la suerte no estuvo de su parte.
Con 22 años, el joven recibió toda la atención de quienes pasaban por la zona. De hecho, otro hombre arriesgó su vida subiendo hasta donde estaba para hablar con él y convencerle de que no se suicidara. Y lo hizo, consiguiendo que se dispusiera a bajar del puente.
Sin embargo, cuando ambos estaban descendiendo, el hombre, que presentaba síntomas de haber bebido, perdió el equilibrio precipitándose al vacío. El golpe de la caída le hizo perder la vida. Decisión que había rechazado cuando finalmente decidió no suicidarse.