EN ITALIA
A solo una hora del sur de Nápoles los búfalos de una de las principales granjas lecheras orgánicas de Italia reciben un trato excepcional.
El dueño de esta granja sabe que para conseguir una de las mejores mozzarellas del mundo, los animales deben estar muy bien cuidados y por ello dispone de una maquinaria de última generación pese a que el queso se sigue elaborando a mano siguiendo los métodos tradicionales.
El secreto para que el queso que produce sea uno de los mejores del mundo consiste en mimar mucho a los animales y por ello, cada mañana las 600 búfalas de Vannulo se despiertan con el sonido de las sinfonías de Mozart.
Tras el concierto matinal, las búfalas reciben un masaje gracias a la maquinaria con la que cuenta la granja.
Pero este no es el único avance de Vannulo: esta granja también utiliza un Sistema de Ordeño Voluntario, que automatiza el proceso del ordeño, de manera que cuando las búfalas están listas, se acercan a una barrera y se someten a un escáner que detecta si sus ubres están listas para el ordeño. Si es así, la barrera se abre y el búfalo se mueve hacia delante. Si no, un torno la redirige para que siga pastando.