Bruselas
Los productos incluidos en esta obligación de reparar son, entre otros muchos, lavadoras y lavadoras-secadoras, lavavajillas, pantallas electrónicas, móviles o tablets.
Bruselas lo ha denominado 'derecho a reparar', y quiere obligar a los fabricantes a arreglar sus productos de manera gratuita hasta 10 años después de su compra, con el fin de reducir la basura tecnológica. Estos productos serán electrodomésticos, móviles o tablets.
La Comisión de Ursula von der Leyen presentó tal propuesta y la vicepresidenta de la Comisión, Vera Jourova, declaró al respecto: "Queremos ayudar a los consumidores a reparar sus productos si así lo desean. Les damos herramientas para que tomen decisiones mejor informadas. Queremos incentivar a los productores a hacer posibles las reparaciones, en lugar de entrar en una carrera interminable de comprar nuevos productos que los consumidores no necesitamos. Esto no es sostenible", dijo la política checa.
Una lista de productos que se irá engrosando
Los productos incluidos en esta obligación de reparar son, entre otros muchos, lavadoras y lavadoras-secadoras, lavavajillas, aparatos de refrigeración, pantallas electrónicas, equipos de soldadora, aspiradoras y almacenamiento de datos. A esta lista se incluirán teléfonos móviles y tablets.
Además, la Comisión también quiere crear una plataforma de reparación en internet para poner en contacto a los consumidores con los servicios de reparación y les puedan indicar a las zonas de reparación cerca. Por último, se ha planteado elaborar un formulario europeo de información sobre reparación, en casa de que sea algo leve y el propio usuario pueda repararlo.
Se estima que los vendedores y fabricantes ahorrarán alrededor de 15.600 millones en los próximos 15 años. También se espera que el crecimiento y la inversión aumente en 4.800 millones durante ese período.