Crisis migratoria
La Comisión Europea monitorea de cerca la situación en España.
Bruselas observa con creciente preocupación la situación migratoria que se sucede en España, especialmente en las Islas Canarias. La Agencia Europea de Fronteras, Frontex, ha solicitado al Gobierno español que permita su colaboración para gestionar la creciente llegada de migrantes a las costas canarias. Se espera que estas llegadas aumenten en los próximos días debido a factores climatológicos favorables, lo que afectará también a otras rutas, como Baleares, que ha comenzado a experimentar un incremento en las llegadas masivas.
El director ejecutivo de Frontex, Hans Leijtens, ha subrayado la necesidad de una mayor intervención por parte de la agencia para ayudar a controlar la situación en las Islas Canarias, que han recibido más de 6.000 migrantes solo en los meses de julio y agosto, una cifra que marca un récord. Durante una comparecencia en el Parlamento Europeo, Leijtens describió la situación como "preocupante" debido al "incremento estructural" de las pateras que intentan ingresar a España de manera ilegal. Sin embargo, recalcó que la capacidad de Frontex para intervenir depende completamente de las solicitudes de asistencia que realicen las autoridades españolas.
“Espero que se presente una solicitud para la ayuda que sé que es necesaria”, declaró Leijtens. “He hablado con los centros de recepción de migrantes y con la Guardia Civil; soy plenamente consciente de la gravedad de la situación, pero todo comienza con una solicitud de las autoridades españolas. Sin esa solicitud, no puedo apoyar a las autoridades”, añadió, insistiendo en la urgencia de una mayor cooperación por parte del gobierno español.
Desde la Comisión Europea, la situación en Canarias está siendo monitoreada de cerca, dándole prioridad debido a su carácter alarmante. La Comisión ha recordado que existen partidas económicas disponibles para España, que superan los 30 millones de euros, con el propósito principal de reforzar los centros de acogida. No obstante, han señalado que la cooperación con los países de origen es clave para gestionar la crisis de manera efectiva.
El reciente pacto migratorio acordado en Bruselas hace algunos meses enfrenta retrasos en su implementación práctica, lo que ha llevado a varios países a actuar de manera independiente. Polonia, Finlandia e Italia han tomado medidas unilaterales para gestionar la afluencia de migrantes, con Italia destacándose por los acuerdos firmados con Túnez, Egipto y Libia, que permiten enviar a los migrantes interceptados de regreso a estos países antes de que lleguen a suelo italiano.
En Hungría, el gobierno mantiene un estado de emergencia mediante decreto, lo que permite la aplicación de una política migratoria extremadamente estricta. El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha llegado incluso a amenazar a la Comisión Europea con la posibilidad de enviar migrantes directamente a las calles de Bruselas, lo que intensifica aún más las tensiones entre Budapest y la Unión Europea.
La crisis migratoria en las Islas Canarias pone de manifiesto la urgente necesidad de una respuesta coordinada a nivel europeo, mientras las llegadas masivas continúan desafiando los sistemas de recepción y asilo en las regiones más afectadas.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com