POR FALTA DE SANGRE EN EL CEREBRO
Una mujer en Brasil, a la que se sometieron a una intervención de cirugía estética, terminó no sólo con un vientre más plano y los pechos más grandes, sino que también desarrolló cleptomanía durante unas semanas, según revela un informe del caso.
Unos pocos días después de haber sido dada de alta, la mujer de 40 años empezó a tener "pensamientos intrusivos recurrentes y una compulsión irresistible hacia el robo", según detalla el informe que recoge 'Live Science'.
"Tenía una compulsión irresistible al robo"
La explicación más probable de sus síntomas es que la mujer sufrió un flujo inadecuado de sangre en el cerebro en algún momento durante o inmediatamente después de la intervención quirúrgica, según el reporte del doctor Fabio Nascimento, que es actualmente neurólogo en el Hospital Toronto Western en Canadá, pero quien fue parte del equipo médico durante la hospitalización de la mujer en Brasil.
Según el médico, tras la falta de sangre en el cerebro la función cerebral se vio alterada y puede que interfiera con ciertos circuitos, causando los síntomas neurológicos observados después de la cirugía, como la cleptomanía.
De hecho, había indicios de que la mujer tenía déficit mental inmediatamente después de la operación, que incluyó liposucción, abdominoplastia, aumento de senos y una elevación del brazo, en otoño de 2013. Tras la intervención, se sentía somnolienta, desorientada y apática y también sufría lapsos de memoria.
Cuando sus médicos ordenaron una resonancia magnética para entender por qué la mujer estaba tan diferente, se demostró que había una disminución del flujo sanguíneo en ciertas partes de su cerebro, así como una lesión cerebral como resultado de la falta de oxígeno a las células en una región llamada núcleo caudado, que está implicada en la memoria y el aprendizaje.
La mujer no tenía antecedentes de problemas de salud mental o abuso de sustancias, de acuerdo con el informe del caso.