ASEGURA QUE NO SOSPECHA DE FRAUDE
El líder de la coalición de centroderecha y expresidente del Gobierno italiano, Silvio Berlusconi, pidió que la política "se sacrifique" para poder gobernar el país, durante una intervención telefónica en un programa de la televisión. Berlusconi respondía así a la situación de ingobernabilidad que se ha creado después de que en las elecciones generales celebradas entre el domingo y el lunes no haya habido un partido ganador en el Senado.
"Por el bien de Italia todos tienen que hacer sacrificios. No creo que Italia no pueda ser gobernada", explicó el exprimer ministro, que agregó que no cree que la solución sea volver a votar. Sobre si estudia posibles alianzas en el Senado con el centroizquierda para sacar adelante algunas reformas como la nueva ley electoral, Berlusconi se limitó a explicar que ahora "todos tienen que reflexionar" y que "esto llevará su tiempo".
Para el líder de la coalición de centroderecha el resultado positivo de estas elecciones es que se han quedado fuera del Parlamento personajes como Gianfranco Fini, uno de sus exaliados, o los exjueces Antonio Di Pietro y Antonio Ingroia. El expresidente del Gobierno, que se ha quedado a 120.000 votos de ganar en la Cámara de los diputados, aseguró que "no cuenta con elementos para sospechar que se hayan producido fraudes electorales".