INMOVILIZADO DESDE EL 18 DE MARZO
El barco de rescate de la ONG Proactiva Open Arms permanecerá atracado en el puerto siciliano de Pozzallo, donde las autoridades italianas lo bloquearon el pasado 18 de marzo, después de que el juez de instrucción de Catania, Nunzio Sarpietro, haya aceptado la petición de la Fiscalía.
Sin embargo, según informa el diario 'La Repubblica', el juez se ha declarado incompetente, tras considerar que solo subsiste el delito de inmigración clandestina y no el de asociación para delinquir, del que el fiscal de Catania, Carmelo Zuccaro, acusaba a la ONG española. Como consecuencia de esta decisión, el caso pasa ahora a la Fiscalía de Ragusa, también en la isla de Sicilia.
El apresamiento del Open Arms se produjo después de que el barco llevara al puerto de Pozzalo a 215 migrantes y refugiados que había rescatado en el Mediterráneo. La medida se produjo tras el rescate de 117 personas en una embarcación en aguas internacionales el 15 de marzo, después de negarse a entregar a mujeres y niños a una patrullera de los guardacostas libios que se les había aproximado.
Tras el accidentado rescate, la entidad de salvamento de refugiados pidió al centro de mando en Roma que le asignaran un puerto para desembarcar a los rescatados pero hasta 24 horas después no recibió respuesta, después de que tuviera que intervenir incluso el Gobierno español.
La Fiscalía de Catania argumenta que la ONG habría debido solicitar desembarcar en Malta, ya que era el puerto más cercano y se acercaron a él para desembarcar a una recién nacida que se encontraba grave. Según el argumento del fiscal, Proactiva Open Arms no lo hizo porque sabe que Malta no acoge a inmigrantes.
Finalmente, la embarcación de la ONG de Badalona (Barcelona) atracó en Pozzallo y al día siguiente fue bloqueada por el fiscal de Catania, bajo el argumento de que habría favorecido la inmigración clandestina hacia Italia.