LE COSTÓ 10 EUROS
Emma Marsh, de 21 años y de Brisbane, Australia, notó que su goldfish, llamado Conquer, empezó a ahogarse tras tragar accidentalmente una piedra en su pecera. según informa el medio australiano Courier Mail.
Conquer no pudo escupir la piedra debido a su tamaño. Por ello, Emma lo llevo a una clínica veterinaria porque la piedra le bloqueaba la vía respiratoria y se estaba asfixiando.
La veterinaria Emma McMillan indicó que le sorprendió el tamaño de la piedra que se tragó Conquer. "Él pesa 13 gramos y su longitud es de sólo 5 cm, la gravilla era aproximadamente de 9 mm de largo y estaba atrapado en sentido longitudinal", explicó.
McMillan y su equipo puso anestesia en el agua del pez, cuando se durmió, empezaron el proceso. Con una pinza la veterinaria consiguió sacar la piedra.
La dueña del goldfish pagó 444 euros por la consulta de emergencia, la anestesia y la noche en el hospital veterinario. Su pez le costó solo 10 euros. Pero Emma aclaró que valió la pena, "trato a los peces como si fueran cualquier otro animal doméstico".