SEGÚN DATOS DE LA BBC
La Policía Metropolitana de Londres tiene un programa especial, el Proyecto Violet, que investiga el maltrato de menores asociado a creencias religiosas o rituales de exorcismo o brujería, a menudo vinculados a tradiciones de África y Asia. Un portavoz del Proyecto Violet, Terry Sharpe, dijo a la BBC que, aunque el número de casos es reducido, se detecta una tendencia al alza, y su gravedad puede variar desde las palizas "hasta el homicidio".
"Hemos tenido un caso en el último año en que un niño de 9 años fue considerado un demonio por su familia y echado de su casa, y los servicios sociales le encontraron descalzo en la calle", denuncia el agente. La fundadora de Africanos unidos contra el abuso infantil, Debbie Ariyo, explica que las acusaciones de que los niños están poseídos aparecen muchas veces cuando hay problemas en los hogares.
"Se culpa a los niños, en especial a los hijastros", relata Ariyo, que añade que muchas congregaciones religiosas que fomentan estas creencias "tienen un interés económico".