EL SEGUNDO DEL AÑO 2015
El atentado que ha tenido lugar esta tarde contra la embajada de España en Kabul, reivindicado por un grupo talibán, se suma a otros ataques contra legaciones españolas en el exterior.
Durante los últimos quince años distintas representaciones españolas en el exterior han sido el objetivo de once ataques.
Siguiendo la cronología, el 19 julio de 2001 un artefacto de escasa potencia estalló ante la puerta del consulado en Milán, al norte de Italia.
En el año 2003 también se produjeron dos ataques. El 25 febrero, en pleno conflicto entre el Gobierno y la oposición de Venezuela, las disputa se acerca a las puertas de la embajada española y del consulado colombiano en Caracas, donde dos fuertes explosiones causaron importantes daños materiales.
El segundo ataque tuvo lugar el 9 octubre, en el que el agregado de Información de la embajada española en Bagdad, el militar José Antonio Bernal Gómez, es asesinado de un tiro en la nuca cuando salía de su domicilio.
Casi un año después, el 22 septiembre de 2004, una explosión de un coche bomba estalla en la residencia del embajador español en Bagdag.
En marzo de 2005 se halla un artefacto explosivo a la entrada de la embajada en Manila, compuesto de dinamita y un teléfono móvil dentro de una caja de zapatos, pero sin detonador.
Entre 2006 y 2009, los objetivos fueron diversos. La Oficina de Turismo en Zúrich (Suiza), la embajada en Tetuán, donde un hombre asesino al policía que custodiaba la puerta. También la embajada en Caracas, el consulado de España en Salónica (Grecia) y la embajada en Kinshasa, que tuvo que ser evacuada en el año 2007 al ser alcanzada por un obús.
Desde el año 2009 las dependencias consulares españolas en el exterior no habían vuelto a sufrir ningún ataque, hasta esta tarde donde talibanes han cometido un atentado contra la embajada en Kabul.