Vacuna coronavirus
La empresa farmacéutica AstraZeneca y la Unión Europea tienen previsto para esta tarde de miércoles una reunión en mitad de las tensiones porque se le acusa a la farmacéutica de incumplimiento de contrato con las vacunas contra el coronavirus.
A primera hora de la mañana informaban desde la Comisión Europea no estaría en la reunión prevista. Aunque horas más tarde, el máximo ejecutivo de la farmacéutica ha informado de que sí estarán presentes.
Reunión con AstraZeneca
La reunión programada entre la farmacéutica AstraZeneca y la Comisión Europea para abordar los retrasos comunicados en las entregas de su vacuna contra el coronavirus había sido cancelada en un primer momento, aunque la farmacéutica finalmente ha informado de que sí acudirá a la cita.
"AstraZeneca nos ha dicho hoy que la reunión no tendrá lugar y es toda la información que puedo dar por ahora", comunicó en rueda de prensa la portavoz comunitaria Dana Spinant, quien añadió que a lo largo del día la UE facilitaría más detalles sobre su postura.
El encuentro, programado para esta tarde, era el tercero de esta semana, tras dos reuniones sin buenos resultados, después de que la farmacéutica que ha desarrollado una vacuna contra el coronavirus en colaboración con la Universidad de Oxford anunciara problemas con las entregas iniciales a la UE.
La reacción de la UE
La UE, ante la noticia de que la empresa farmacéutica podía no acudir a la reunión, reaccionó con irritación al comunicado de AstraZeneca. También le exigen a la farmacéutica que explique "exactamente qué dosis se han producido y dónde por AstraZeneca hasta ahora, y a quién o a dónde se le han entregado".
Bruselas afirmó que la reducción de dosis de la vacuna del coronavirus era "considerable" y exigió a la farmacéutica que cumpliera su contrato. Pascal Soriot, consejero delegado de la farmacéutica, aseguró en una entrevista que los retrasos responden a procesos de producción y negó que el laboratorio haya vendido las dosis europeas a otros países. Afirma que el Reino Unido firmó el contrato con la farmacéutica tres meses antes que la UE.