Iceberg
El iceberg sería más del doble del tamaño de Londres.
El iceberg más grande del mundo, que sería más del doble del tamaño de Londres, se mueve tras décadas encallado en el fondo marino de la Antártida, cuenta la CNN. Se trata de una enorme masa de hielo que se desprendió de la plataforma de hielo 'Filchner-Ronne' en el año 1986 y se hundió en el fondo del mar de Weddell en la Antártida muy rápido. El iceberg se llama 'A23a', tiene unos 400 metros de espesor y casi 4.000 kilómetros cuadrados de superficie. Tiene 1.572 kilómetros cuadrados.
Han pasado casi tres décadas, en las que probablemente se ha reducido de tal manera que podría haber perdido su agarre en el fondo marino como parte del ciclo de crecimiento natural de la plataforma de hielo, y ha empezado a moverse, según explicaron a CNN los científicos Ella Gilbert y Oliver Marsh de la British Antarctic Survey (BAS).
El 'A23a' ha tenido varias veces el título de "mayor iceberg actual" desde la década de 1980. En algunas ocasiones ha sido superado por icebergs más grandes, pero con una vida más corta, incluyendo el A68 en 2017 y el A76 en 2021, explicaron.
De manera previsible, el iceberg irá hacia el este. Al ritmo que se desplaza en la actualidad, se calcula que viaja cinco kilómetros cada día.
Según la CNN, precisaron que este iceberg probablemente se desprendió como parte del ciclo de crecimiento natural de la plataforma de hielo, pero que el cambio climático está produciendo cambios en el hielo de la Antártida, de manera que el continente está perdiendo grandes cantidades de hielo cada año.
Al igual que la mayor parte de icebergs del sector de Weddll, el 'A23a' será expulsado, prácticamente con toda seguridad, a la Corriente Antártica Circumpolar. Esta lo arrojará hacia el Atlántico Sur en una especie de camino que se ha convertido en una especie de 'callejón del iceberg'.
Según se van derritiendo estos icebergs, liberan el polvo mineral que se incorporó a su hielo cuando formaban parte de los glaciares que raspaban el lecho rocoso de la Antártida. Este polvo supone una fuente de nutrientes para los organismos que forman la base de las cadenas alimentarias de los océanos.