Atentado en Moscú
Un autor del brutal atentado reconoció ante la cámara de una periodista que fue captado por un predicador a través de las redes.
Los autores del sangriento atentado en el centro comercial de las afueras de Moscú en el que han muerto al menos 137 personas consiguieron darse a la fuga y obligaron a Rusia a desplegar una amplia "operación jaula" durante toda la madrugada.
Los terroristas huyeron de Moscú y fueron detenidos en la localidad de Briansk, aproximadamente a cinco horas en coche al sur de la capital, cerca de la frontera con Ucrania. Sobre la 1 de la madrugada se hizo pública la matrícula del coche blanco en el que viajaban los autores. Son cuatro hombres los que participaron directamente en el atentado y pocas horas después el Estado Islámico publicaba la imagen reivindicando la autoría. De momento en la investigación no se han mostrado pruebas que vinculen a Ucrania con el atentado. Además, tanto Estados Unidos como Europa han condenado el ataque terrorista.
Eso sí, los líderes europeos han querido ser precavidos en sus respectivos comunicados para dejar claro que quien está detrás es el Estado Islámico y que nada justifica que se acuse a los ucranianos. En el entorno de la UE existe una cierta preocupación porque dan por hecho que Rusia suele utilizar pretextos como este para intensificar su campaña de ataques contra Ucrania. "El régimen de Putin es impredecible", le han explicado fuentes europeas a nuestro corresponsal en Bruselas, Guillermo Pascual.
La cacería para localizar a los responsables de la masacre de este pasado viernes ha dado fruto rápidamente. En un punto de la carretera hacia Bielorrusia y Ucrania, a 340 kilómetros de Moscú, los sospechosos fueron detenidos en un control de carretera tras un tiroteo y varias escaramuzas.
Los cuatro presuntos autores huían en un vehículo que les había proporcionado un curandero que vive en Moscú, de nombre Abdul. Dos de ellos han sido interrogados ante la cámara de una periodista: "Volé desde Turquía el 4 de marzo", respondía en ruso con un fuerte acento tayiko. Uno de los sospechosos admite que ha actuado por dinero, unos 5.000 euros y que además fue captado por un predicador a través de las redes sociales, también narra que para este asalto se preparó durante un mes junto con sus compañeros y que las armas las recogieron en un zulo.
Otro de los autores era peluquero y se entrenaba en un club de lucha libre de Ivanovo, a 300 kilómetros de Moscú. En las últimas horas, las peluquerías donde trabajó y un gimnasio de la zona están recibiendo amenazas para que cierren, acusados de ser "nidos de terroristas".
A pesar de los vínculos con el islamismo de los detenidos, Vladimir Putin ha evitado mencionar al Estado Islámico en su mensaje de hoy, apuntando en otra dirección: "Los cuatro autores reales de este acto terrorista, intentaron esconderse y se dirigían hacia Ucrania", ha recalcado el líder ruso, quien también ha asegurado que contaban con ayuda para cruzar la frontera. Kiev ha negado tajantemente cualquier vinculación y asegura que todo es un pretexto del Kremlin para recrudecer aún más su ofensiva contra Ucrania.
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