TURQUIA | JORNADA DE TENSA CALMA
Tras la intentona fallida del golpe de Estado, Turquía se encuentra en una situación llena de tensiones. Una oleada de registros y detenciones han azotado la capital turca. La complicada situación finalizó con la muerte de cuatro civiles en tres diferentes incidentes en Ankara.
El primer incidente se produjo cerca del edificio del Tribunal Supremo, donde la Policía está llevando a cabo un registro para arrestar a decenas de jueces de este cuerpo. Una persona aún no identificada disparó contra los agentes que vigilaban fuera del edificio y fue abatido posteriormente en un tiroteo.
En otro incidente, que tuvo lugar a varios kilómetros de los Juzgados, los ocupantes de un coche dispararon contra una patrulla de la policía, que devolvió el fuego. Uno de los tres ocupantes del coche murió en el tiroteo y los otros dos fueron detenidos.
En un tercer suceso, una persona, que luego fue identificada como un oficial del Ejército, al verse rodeado por policías, tomó como rehén al conductor de un coche, le disparó y emprendió la fuga con este vehículo. Al no poder continuar su huida, comenzó a disparar a los policías y se trasladó a un coche distinto, pero fue finalmente arrestado, tras haber disparado a la cabeza al segundo rehén.
Por otro lado, la Policía ha detenido a 103 generales y almirantes de las Fuerzas Armadas turcas bajo la acusación de haber estado involucrado en la intentona del golpe militar del viernes pasado, informa la agencia semipública Anadolu.
La cifra supone casi un tercio de los 356 generales y almirantes que componen la cúpula de las Fuerzas Armadas turcas. Entre ellos se hallan los comandantes del 2º y 3º Ejército de las fuerzas terrestres y el ex comandante de las Fuerzas Aéreas, Akin Öztürk, acusado de ser el cerebro del golpe.
El Ministerio del Interior ha suspendido a 8.777 funcionarios tras la asonada lo que incluye a 7.899 policías, 614 oficiales de la Gendarmería, 30 gobernadores provinciales y 47 gobernadores de distrito. El jefe de la Policía, Mehmet Celalettin Lakesiz, envió a última hora del domingo una lista del personal suspendido a los jefes provinciales.
Los agentes suspendidos han sido convocados al cuartel general provincial de la Policía y han tenido que entregar sus armas y sus placas. Al menos 70 generales del Ejército y almirantes de la Marina de Turquía han sido detenidos por su presunta vinculación con el fallido golpe de Estado, según el registro oficial.
Estos se suman a los más de 6.000 soldados y jueces que han sido detenidos desde el viernes por su relación con la intentona golpista, según los datos anunciados por el ministro de Justicia, Bekir Bozdag, este domingo. Un tribunal de Estambul ha ordenado mantener bajo custodia a trece altos cargos militares acusados de implicación en la intentona, entre ellos el teniente general Erdal Ozturk, comandante del Tercer Ejército, y el director de la academia de la Fuerza Aérea, el general Fethi Alpay.
Todos ellos han sido detenidos por establecer y ser miembros de una organización armada terrorista e intentar un golpe. Por otra parte, otros 99 presuntos golpistas han sido enviados a prisión preventiva en Ankara, entre ellos el general de brigada Hakan Evrim, comandante de la base aérea de Akinci, al noroeste de la capital, que se cree que funcionó como cuartel general de los golpistas.