Terremoto Marruecos
Marruecos trabaja contrarreloj en tareas de rescate para buscar a más posibles víctimas del terremoto bajo los escombros.
Las autoridades de Marruecos han elevado a casi 2.500 el balance provisional de fallecidos por el terremoto que sacudió la zona centro del país. No descartan que la cifra pueda seguir aumentando por el elevado número de heridos y la búsqueda de más posibles víctimas entre los escombros.
El Ministerio del Interior ha registrado hasta el lunes 2.682 muertos y 2.476 heridos. Solo en la provincia de Al Hauz, el epicentro del seísmo, corresponden más de 1.400 víctimas mortales. Le sigue Tarudant con 760 víctimas, según el recuento oficial. Las provincias de Chichaua, Uarzazate, Marrakech, Agadir y Casablanca son otras de las más afectadas.
El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, ha indicado que no consta ningún español muerto o herido. De los españoles no residentes, que se encontraban en Marruecos por turismo, desplazamiento profesional o en tránsito, tan solo dos personas no ha podido aún ser contactadas por teléfono, según ha informado Albares.
Un boletín de alerta sísmica difundido por el Instituto Nacional de Geofísica marroquí explica que el terremoto, de magnitud 7, sacudió la zona septentrional de Marrakech.
El país ha anunciado la suspensión de las clases en 42 localidades y comunas. La medida afecta a localidades en las provincias de Al Hauz, Chichaua y Tarudant. El Ministerio de Educación Nacional marroquí señaló que el seísmo ha causado daños en 530 escuelas y 55 internados. Ciudadanos de varias ciudades marroquíes también han lanzado iniciativas para asistir a los supervivientes del terremoto. Han mandado ropa, mantas y productos alimentarios hasta las aldeas afectadas, como en la ciudad norteña de Alhucemas.
Las autoridades de Marruecos prosiguen con los trabajos de asistencia a las zonas afectadas. Por el momento han aceptado la ayuda de España, Reino Unido, Qatar y Emiratos Árabes Unidos. Otros países también se han ofrecido a enviar equipos, por ahora sin el aval de Rabat.
"Con el avance de las operaciones de intervención que evolucione la evaluación de las posibles necesidades, eso llevaría a recurrir a las ofertas de apoyo propuestas por otros países amigos de acuerdo con las necesidades de cada etapa", dijo el Ministerio.
Asimismo, indicó que las autoridades del país podrían recurrir a más ayuda internacional conforme avancen las labores de rescate.
Arabia Saudí y Omán se han sumado al envío de ayuda. Riad decidió establecer un "puente aéreo para proporcionar diversos tipos de ayuda humanitaria, con el fin de mitigar los efectos del terremoto". La ayuda fue ordenada por el monarca saudí, Salmán bin Abdelaziz, y el primer ministro y príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, para "estar al lado a los hermanos marroquíes damnificados".
El sultán de Omán, Haitham bin Tarek, también "ordenó enviar equipos de rescate y ayuda urgente de socorro y tratamiento médico para apoyar los esfuerzos del hermano reino de Marruecos para hacer frente a los efectos del reciente terremoto" por las "relaciones fraternales entre ambos países".
El Gobierno francés anunció que destinará cinco millones de euros a las ONG sobre el terreno en la zona, tanto francesas como internacionales. El objetivo es apoyar las tareas de búsqueda y reconstrucción. A pesar de ello, Francia no ha formado parte del puñado de países cuya ayuda ha sido aceptada por Rabat.
El Gobierno portugués se mantiene a la espera de recibir una petición de Marruecos para enviar equipos de ayuda al país tras haberse ofrecido. "Mantenemos los equipos listos. Aun así, sólo serán movilizados con una petición oficial de las autoridades de Marruecos", informó el ministro de Administración Interna, José Luís Carneiro.
Carneiro explicó que Rabat ha "agradecido este gesto de solidaridad al Estado portugués", pero que ha pedido tiempo, ya que "todavía están en una fase de estudio de las necesidades para determinar y decidir si habrá necesidad de ese apoyo".
Para atender a la población que se encuentra en una situación desesperada, el Comité de Emergencia también ha puesto en marcha sus protocolos de actuación. Las ONG que lo integran son Aldeas Infantiles SOS, Educo, Médicos del Mundo, Oxfam Intermón, Plan International y World Vision y ya se encuentran realizando las primeras evaluaciones. El objetivo es prestar refugio, alimentación, educación, agua y saneamiento, y asistencia sanitaria ya sea directamente o a través de organizaciones socias locales.
La ayuda española se ha materializado ya con el envío del equipo de Búsqueda y Rescate Urbano de la Unidad Militar de Emergencias (UME), que llegó este domingo a Marrakech. Este equipo de rescate está compuesto por 56 militares y cuatro perros. También grupos de bomberos españoles llegaron para colaborar con las autoridades marroquíes.
Los bomberos de Zaragoza llegarán esta tarde a Tánger para dirigirse hasta la zona afectada. Allí comenzarán a trabajar en zonas rurales, que han sido menos exploradas. En el área establecida, además de labores de rescate y salvamento, habrá que prestar atención a heridos que no hayan sido desplazados, explica el jefe de expedición de los bomberos de Zaragoza, Enrique Mur. En la zona se encuentra también un segundo contingente español con 30 miembros a bordo de la Unidad Especial de Emergencias y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid (ERICAM) y cuatro perros del equipo especializado de búsqueda y rescate.
La ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha manifestado su disposición de enviar más efectivos de la UME. "Nuestra disponibilidad es absoluta al igual que hicimos en Turquía", ha asegurado.